Es una estrategia que siempre me ha dado buen resultado. Cuando una pieza o un elemento de algún mueble o electrodoméstico no funciona correctamente, una buena solución puede ser, sencillamente, darle la vuelta y ponerla del revés.Lo hice con la puerta de un frigorífico que ya no cerraba. Y con otra puerta de un armario de cocina. Con la tapicería del coche, con el filtro del aire del aspirador, con el saco de recogida de hojas secas del jardín. Se le da la vuelta y asunto concluido.
Puestos a pensar, quizás esta artimaña también pueda utilizarse en otros problemas que nos plantea la vida diaria. Que tu pareja es muy habladora, pues dale la vuelta al caso y hazte tú hablador. Que te acusan de ser tacaño. Dale la vuelta al calcetín y actúa como si te sobrara el dinero. Si las relaciones con tu jefe son de sumisión, prueba a revertir a la situación, habla con firmeza y suficiencia y es probable que la cosa funcione mejor.
Si algo he mantenido siempre es que ante un problema siempre hay que dar algún tipo de respuesta. Nunca quedarse parado.




















"Aunque el litio es fundamental para algunas personas, para la mayoría resultan mucho más importantes todos los núcleos pesados, como el carbón, el nitrógeno, el oxígeno, el hierro y demás. Éstos no se formaron durante el Big Bang. El único lugar donde pueden formarse es el abrasador núcleo de las estrellas. Y el único modo en el que podrían haber pasado al cuerpo de un lector contemporáneo es que esas estrellas tuvieran la gentileza de explotar y diseminar sus productos por el cosmos, de forma que estos pudieran, algún día, fusionarse en y en torno de un pequeño planeta azul situado cerca de la estrella que conocemos como el Sol. En el transcurso de la historia de nuestra galaxia, han explotado unos 200 millones de estrellas. Es una miríada de estrellas que, por así decir, se han sacrificado para que un día pudiéramos nacer. Bien cabría calificarlas, con tanto mérito como el que más, de nuestras Salvadoras."













