No es de extrañar que no conociera nada sobre Kirguistán. Hasta 1991 no alcanzó la soberanía como estado-nación y, hasta entonces, quedaba englobada en el grupo de países terminados en "stán" que formaban parte de la Unión Soviética.
En la escuela veíamos de pasada la URSS. No se diferenciaban unos países de otros. Se consideraba como un todo. Allí reinaba el comunismo. No era plato de agrado del régimen de Franco. Así se nos privó de profundizar en el análisis de la historia, la geografía y la composición étnica de todas esas repúblicas.
Una pena porque lo que me he encontrado ha sido amabilidad por todos los lados, un mosaico de etnias y de culturas y el empeño de un pueblo que no acaba de digerir a sus dirigentes.
Con una superficie similar a la de las comunidades de Andalucía, Castilla-León y Madrid juntas (199.951 km2), Kirguistán es un país de Asia Central sin salida al mar que hace frontera con Kazajastán, China, Tayikistán y Uzbequistán.
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| Kirguistán. Plano de situación |
A Kirguistán se le conoce como "la Suiza del Asia Central" debido a que la región montañosa de Tian Shan se extiende a lo largo de más del 80% de la superficie del país.
Aquí no se nota tanto la huella anglosajona (afortunadamente) porque este país siempre ha estado en la órbita de Rusia. De hecho, el ruso junto con el kirguís son los dos idiomas oficiales.
Pero mejor que mis explicaciones, vamos a seguir los pasos de conocidos viajeros amigos que ya han hollado esas tierras.
En primer lugar la presentación del país por parte de nuestro amigo Paco Nadal.
Ahora una presentación un poco más formal con preciosas vistas.
Y finalmente, el informe de un viejo conocido (Dos bicis y un destino)
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| Bucólico paisaje con las "yurtas" al fondo |
- Existe un país llamado Kirguistán
- 10 razones por las que visitar Kirguistán
- Kirguistán: anotaciones al margen
Pasemos a continuación a las formalidades. Veamos -por curiosidad- la web oficial de la presidencia de la república (en ruso) y el portal oficial de turismo (en inglés). Todo ello complementado con la ya tradicional ficha-país de nuestro Ministerio de asuntos exteriores.
Aprovechemos ahora para ilustrarnos sobre las tres ciudades más importantes del país. Primero a través del documental "Otros pueblos" de Luis Pancorbo y, posteriormente, deteniéndonos un poco más en cada una de estas ciudades: Bishkek -la capital- (1), (2), (3) y (4), Osh y Karakol
Como contraste, este curioso reportaje sobre la vida en un pueblo del país.
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| Niños kirguises |
Un tema que me ha llamado mucho la atención es que todavía sigue vigente una antigua (y obsoleta) tradición denominada Ala-Kachuu por la cual puede ocurrir que una mujer sea raptada con la finalidad de casarla con su secuestrador. Nos lo cuentan en estos dos informes (1) y (2)
Otro detalle de la opresión que sufren algunas mujeres en Kirguistán nos lo muestran en este reportaje en el que unos hombres agreden a varias mujeres que se manifiestan contra la violencia de género.
Y una muestra de que en este país no han estado precisamente muy calmados los ánimos es la sucesión de inestabilidad política, conflictos étnicos y revueltas que se han sucedido hasta hace muy poco. Lo vemos en los informes "Kirguistán se hunde en el caos" y "El presidente dimite después de 10 días de caos" sobre los sucesos acaecidos en 2020.
¡Bufff! ¡Cuánta complicación!
No quiero irme con mal sabor de boca. Echaré mano de la videoteca y seleccionaré algo de música para relajar un poco.
Primero una bella canción tradicional kirguís. Después una familia tocando instrumentos musicales tradicionales y, finalmente, algo más moderno.
Pues nada. Aquí finaliza mi viaje por Kirguistán. Me despido de este hermoso e intrigante país y me dispongo a dar un nuevo salto. Mi próximo destino está en Oceanía. La próxima semana visitaré Kiribati. El domingo os cuento cómo ha sido la experiencia.
Byeeeee!
Un bello país Kirguistán, parece que es de otro planeta.
ResponderEliminarComo dices,nos privaron de conocer a fondo a la antigua URSS,por haberla quitado de los libros.
Ese verdor de sus praderas nos dicen que eso fue lo que nos perdimos, las gentes, su hospitalidad, su forma de vida trashumante, con sus famosas yurtas.
Da la sensación de que han evolucionado poco, pero dentro de su naturalidad, tampoco es que les demos envidia por nuestra forma complicada de convivir.
La tranquilidad y la placidez que proyecta ese país nos tiene que servir para cambiar la mirada de occidente.
Este país tiene mucho por descubrir.
Grata sorpresa me he llevado.
Ah, la música también les acompaña, muy bonita.
La modernidad de sus tres ciudades,dan de fe de que también están en la onda moderna.
He disfrutado.
Saludos profesor.
Hasta Kiribati, para visitar esos mares inmensos.
Buen artículo. Yo estuve un fin de semana haciendo escala al regresar de Afganistán. Tuvimos un pequeño destacamento de aviación integrado en la base Norteamericana próxima a la capital. Los kirguises me parecieron muy hospitalarios me llamo la atención el gran número de kioskos para la venta de bebidas alcohólicas y los horarios de apertura ...todo abierto las 24 horas.
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