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jueves, 6 de diciembre de 2012

Visita a la escuela Waldorf de Zaragoza

Como decía un buen amigo mío: ... "aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid..." pues acepté muy gustoso la invitación de C.F., compañera del instituto y madre de dos niñas que acuden a la escuela Waldorf de Zaragoza para interesarme por esta iniciativa de la asociación "O Farol" y participar en el mercadillo que organizaron el pasado domingo 25 de noviembre en las propias instalaciones del colegio.

El programa preparado no podía ser más interesante:
- Talleres para niños y adultos
- Actuaciones musicales
- Puestos de libros, juguetes y material Waldorf
- Información sobre las actividades de la Asociación O Farol

Así es que sobre las 11 de la mañana ya estábamos en el Camino Caidero dispuestos a empaparnos de todo lo referido a la pedagogía Waldorf.

Justo al lado de la escuela hay un centro de equitación, que esa mañana se encontraba a pleno rendimiento. Las imponentes estampas de los caballos, obedientes a las directrices de los jinetes siempre constituye un espectáculo digno de contemplar. Todavía dedicamos un rato a disfrutar de las evoluciones de los nobles animales y de la pericia de sus dueños con las riendas.

Nos reciben a la entrada de la escuela Waldorf con una sonrisa y un sencillo obsequio. Se agradece el detalle y la amabilidad de la persona encargada de dar la bienvenida a los visitantes. Desde el momento que traspasamos el arco de la entrada apreciamos una atmósfera de sosiego y serenidad. Hay mucha gente y también se respira mucha armonía. Niños y mayores, en apacible convivencia recorren de aquí para allá los puestos preparados con gran detalle por los miembros de la Asociación O Farol, organizadora del evento.

Me detengo en un puesto de mermeladas elaboradas artesanalmente. No resisto la tentación de probarlas todas. Están buenísimas. Decido quedarme con un botecito de mermelada de ciruela. Tendré que racionármela para disfrutar durante más días de su exquisito sabor.

Enseguida diviso a mi compañera-profesora que, muy diligente, asume con rapidez su rol de cicerone para enseñarme las instalaciones y detallarme la función de cada una de ellas. Realizamos un breve recorrido por los distintos puestos instalados para la ocasión, el jardín, la zona de huerto y árboles frutales y, finalmente, me muestra también el interior del recinto donde se ubican las aulas y el resto de salas dedicadas a una mejor educación de niños y niñas. Hablamos también con algunos profesores de las particularidades de la enseñanza de las distintas áreas curriculares con el enfoque de la pedagogía Waldorf.

Cada comentario, cada explicación aviva en mí la llama del interés y la curiosidad por esta iniciativa pedagógica. Me parece todo tan natural, tan lógico y tan armonioso que, casi sin querer, mi mente busca alguna disonancia cognitiva, algo que no acabe de cuadrar con el mundo desarrollado de nuestros días.

Pero no lo encuentro. Es evidente que la sociedad que hemos construido, a pesar de sus grandes logros, deja también mucho que desear. Y desde luego, ahora más que nunca, es cuando se muestra en toda su crudeza la aplastante dialéctica de lo económico frente a los valores humanos de siempre: el diálogo, la comprensión, la paciencia, la bondad, la empatía y la solidaridad con los demás...

Sería ahora muy extenso comentar en toda su extensión las particularidades de la educación Waldorf. Para los que tengáis interés, podéis echarle un vistazo a este enlace y a este otro. También os dejo dos folletos explicativos de las actividades que desarrolla la asociación.

Así es que, para finalizar, no puedo menos que aplaudir y alentar esta iniciativa de la Asociación O Farol y desear que poco a poco se vaya extendiendo y generalizando su filosofía. De momento me conformaría con que nuestras escuelas e institutos "convencionales" se fueran empapando y también fueran poniendo en práctica algunos de los ideales que alumbran los centros Waldorf. Es necesario cambiar la educación industrializada por la Educación Personalizada y Humanizada antes que el monstruo de la economía neoliberal nos acabe devorando a todos.

5 comentarios:

  1. Veo que no paras con tus andanzas, siempre visitando sitios curiosos con la consiguiente interpretación, centros especiales que se salen de la norma. Gran disertación por tu parte. Un abrazo de Javier.

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  2. Me ha venido muy bien leer este artículo ya que estaba buscando información sobre este centro.

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    1. Me alegro mucho de poderte ayudar. Espero que esta información contribuya a facilitar tu decisión. Un saludo. JL Pueyo

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  3. Antroposofista. Éste es el raro nombre de la secta que está detrás de este tipo de colegios. Cuidado. Estamos hablando de una secta irracional que busca hacerse clarividente. Ahí es nada. Secta Antroposofista. Más información:

    http://charlatanes.blogspot.com.es/

    http://www.youtube.com/watch?v=YFnvrGlmSMs&feature=player_embedded#at=352

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  4. Entonces tras los colegios católicos está la secta de la Iglesia que busca la vida eterna en el Paraíso... Cuidado porque esta es muchísimo más irracional. La espiritualidad nos guste o no es poco innata al ser humano y Waldorf es un ejemplo del buen hacer en el desarrollo espiritual de las personas.

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