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viernes, 11 de noviembre de 2022

ACO45 Overthinking


Cuando no sepas dónde ir, sigue el perfume de un sueño.


 Otra nueva palabreja de factura anglosajona para definir algo que en español podríamos definir como "pensar demasiado"

El ser humano necesita pensar para hacer frente a los desafíos de la vida. Cuanto más elaborado es el pensamiento, más posibilidades de éxito ante los retos que se nos plantean.

Pero claro, no todos estamos hechos con el mismo patrón. Y cada cual procesa la información con las particulares herramientas de las que dispone.

Cuando hay un desequilibrio entre la envergadura del problema a resolver y la cantidad de energía que se invierte pensando sobre ello, nos encontramos con una situación de Overthinking.

No hay que olvidar que la principal misión del cerebro pensante es la continua adaptación a las cambiantes situaciones del entorno en todos sus sentidos.

Cuando la necesaria función de pensar para resolver algo pierde la esencia de su cometido, entonces podemos caer en la generación de "pensamientos chatarra" o cogniciones que no tienen una finalidad concreta.

No digamos nada de los pensamientos tipo rumiación o los circulares en los que el sujeto no para de darle vueltas a lo mismo sin encontrar nunca la solución más adecuada.

Otra tendencia habitual entre los enfocados a pensar más de la cuenta es la revisión obsesiva de hechos ocurridos en el pasado o bien el enfocarse excesivamente en lo que va a ocurrir en el futuro. Ambos enfoques desajustados pueden perturbar la armonía mental de las personas que los practican.

Habitualmente detrás de esta tendencia a "sobrepensar" se esconden miedos o temores que acechan al sujeto. Por ejemplo, el perfeccionismo o el miedo al fracaso.

Cuando el miedo al fracaso nos incapacita para transformar nuestras reflexiones en acciones concretas, la situación puede desencadenar un trastorno de ansiedad.

Para anticiparnos y prevenir estos desórdenes, lo mejor es aprender a reenfocar nuestros pensamientos y focalizarnos en otras cogniciones alternativas. También nos debemos entrenar en relativizar la trascendencia de hechos que ocurrieron en el pasado o el impacto de lo que pueda pasar en el futuro.

Aquí os dejo dos artículos que me han parecido de gran interés sobre estas cuestiones:

- "Overthinking". Cómo hacer frente al pensar demasiado.

- ¿Eres víctima del overthinking? 6 tips para no darle más vueltas.

... Y el episodio 1 de:

         "Llega el rompehielos". Overthinking con Kate and June

¡Nos vemos la próxima semana!

2 comentarios:

  1. Un buen artículo José Luis.
    O volverte pasota, o enfocar los temas sociales con tranquilidad, esa es la dimensión.
    La obsesión sobre ciertos temas no es conveniente, y darte excesivo mal por las cosas tampoco.
    Abrumarse mucho , por ejemplo, con los problemas actuales tampoco es conveniente.
    Para ir tirando para adelante hay que centrarse un poco, no queda otro remedio.
    Saludos, José Luis.

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  2. Palabras muy juiciosas, Javier, que resumen de maravilla el contenido de esta entrada. Gracias
    ¡Un saludo!

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