Hay que ser abstemio, pero con moderación.
Todavía queda mucho trecho que andar pero sin dudarlo, la iniciativa merece la pena totalmente. Por lo que he ido viendo hasta ahora, el recuento de aventuras y anécdotas por los primeros 58 países es extraordinario.
Pero no sólo eso. Como ya comentaba en otra entrada, la iniciativa me ha llevado también por derroteros insospechados, por caminos inéditos que me han deparado grandes y agradables sorpresas.
La necesidad de comunicarme en inglés ha sido una de ellas. Este aspecto ha supuesto una gran motivación en mi aprendizaje del idioma. Y, sobretodo una magnífica ocasión para conocer en vivo y en directo personas nativas de otras naciones. Todavía queda mucho que perfeccionar con el idioma, pero ya he asumido con agrado que su aprendizaje y su práctica se mantendrá a lo largo de toda mi vida.
Un segundo ámbito que también me ha sorprendido ha sido el de conocer aventureros trotamundos que -desprendidamente- nos ofrecen en YouTube sus relatos y sus andanzas. Reconozco que envidio a muchos de ellos. Porque a mi también me hubiera gustado llevar su vida.
Pero bueno, con motivación e imaginación uno casi puede hacerse a la idea de que también está allí en persona y que acompaña al protagonista en sus aventuras. Esto era algo impensable hasta no hace mucho. Ahora, de repente, nos podemos teletransportar a cualquier país del mundo sólo con hacer un "click".
Un tercer aspecto nada desdeñable es el de tomar conciencia de la extensión y poblamiento de las distintas naciones visitadas y, por contraste compararlas con nuestro ámbito más próximo: el pueblo, la provincia, la región... A esto hay que añadir el hecho de afinar en el conocimiento de sus diferentes culturas, su situación económica y social, su geografía e historia y su presencia actual en el mundo. Según voy avanzando en mi recorrido cada vez me sorprendo más.
Capítulo aparte merece el tema del folklore. Ya sabéis que me gusta cerrar mis crónicas con uno o varios apuntes referidos a la música genuina de cada país. Pues bien, lo que ya he podido concluir es que hasta ahora he estado muy constreñido por el influjo inglés y el americano. No solamente yo; creo que esto les ha pasado -y les sigue pasando- a muchas personas. Como contrapunto, el hecho de escuchar la sonoridad de las canciones en otros idiomas, de degustar el ritmo y las sutilezas de su música y de apreciar el contenido de las letras me ha supuesto todo un descubrimiento.
Estos 1.000 días que restan de viaje pienso también disfrutarlos a conciencia. Máxime en las actuales condiciones de confinamiento donde cada visita a YouTube es como una escapada a través de una ventana abierta en la pantalla del ordenador.
Y también se me van ocurriendo nuevas ideas para enriquecer la experiencia. Ahora estoy ensayando el formato de "hacer amigos" a través de la aplicación Italki. Cuento ya con un "amigo" en Arabia Saudí con el que hablo con cierta periodicidad. Últimamente he cursado invitaciones a tres posibles "amigos" de Etiopía. Veremos si consigo consolidar la relación...
Cuando queden 500 días volveré a realizar una nueva revisión de todo lo aprendido en mi aventura alrededor del planeta.
Por ahora me quedo con una sencilla frase que mi padre pronunciaba con frecuencia con gran énfasis y que yo creo que resume todo lo dicho hasta ahora:
¡Hay que ver qué grande es el mundo!
¡Un saludo, amigos y amigas! ¡Ya falta menos para que finalice este obligado encierro!
Bueno tu esfuerzo está recompensado con creces con el descubrimiento a fondo de los países.
ResponderEliminarExplicas muy bien tu cometido y el proceso, con una gran claridad de ideas.
Importante es que estás disfrutando y los demás recibiendo información con un alto nivel explicativo.
Ningún capítulo está hecho al azar, todos están hechos con mucho rigor.
Es un viaje virtual de altura, enriquecedor y educativo.
Elegiste un buen entretenimiento.
Los que te seguimos podemos corroborar todo.
Gracias por el esfuerzo, eres único.
Y muy disciplinado.
Etiopía espera.
Enhorabuena, usted es un ser feliz.
Saludos de Javier.
Cada uno en nuestro ámbito, Javier logramos interesantes objetivos. ¡Cuánto me hubiera gustado tocar la guitarra como tú y desarrollar más la vertiente estética como tu tan bien lo haces!
ResponderEliminarEn todo caso lo importante es que cada uno continuemos con nuestro particular viaje a través de lo que nos interesa.
En eso consiste el buen vivir. En mantenernos activos con las ocupaciones que nos interesan.
Saludos afectuosos