Manifestación por una cesión que nunca llega. Fomento y la Avenida Cataluña de Zaragoza

Pocas veces he acudido a una manifestación con las ideas tan claras y con una finalidad tan específica y tan justa. Los vecinos de la Avenida Cataluña de Zaragoza, están hartos de que todas las instancias oficiales les den largas y, finalmente, han tenido que recurrir a manifestarse para mostrar su hartazgo.

El asunto es más simple que un sidral: hasta ahora la Avenida se considera, formalmente, carretera nacional II y, desde hace años y años esa es la excusa oficial para no mover ficha y mantener esta vía en unas condiciones precarias.

Mientras tanto, los vecinos de esa zona (auténtico apéndice olvidado de la ciudad) están quedando privados de todos los servicios de los que tan ricamente disfrutan -disfrutamos- los que hemos tenido la fortuna de adquirir nuestra vivienda en una zona cuyos viales no dependen de Fomento.

Así, desde hace años, han quedado desposeídos de aceras normales, carriles-bici, ruta de bibliobús, estación de zarabici, etc y, a cambio les endosan los putrefactos olores de la papelera, las negras aguas del Gállego y las farolas "Bonanza" de madera. Es normal, por tanto que quieran pregonar a todos los vientos su olvido y los incumplimientos de los que han sido objeto.

La dichosa cesión no se hizo en tiempos de abundancia y, ahora, que las tornas ha cambiado, todavía se ponen más trabas, más objeciones a un trámite que hace muchos años que debería haberse realizado.

La asistencia ha sido nutrida. No ha acudido una multitud pero sí el suficiente personal (y de todas las edades) como para demostrar que, de ahora en adelante, se va a plantar cara a todas las promesas incumplidas, todos los planes enterrados y todos los anuncios rimbombantes -y oportunistas- desmentidos posteriormente por la tozudez de los hechos.

Desde estas líneas del blog del Periplo nos solidarizamos con la protesta de los vecinos de las viviendas y urbanizaciones de la Avenida Cataluña y, en la medida que podamos seremos altavoz amplificado de sus justas reivindicaciones.