Llevo ya varios meses intentando que me domicilien el pago de un teléfono Simyo.
En teoría la gestión ya debería haberse resuelto satisfactoriamente puesto que varias operadoras me aseguraron que la gestión ya estaba hecha correctamente.
Pero resulta que mes tras mes recibo el mismo correo electrónico indicándome que tengo pendiente de pago la factura del dichoso teléfono.
Después de hablar en innumerables ocasiones con un contestador automático he llegado a la conclusión que la gestión de "mi caso" la lleva la inteligencia artificial de la compañía.
Como mi consumo mensual es bastante limitado estoy seguro que Simyo ya ha realizado una criba entre clientes que gastan más y los pobrecicos que no tenemos donde caernos.
Por lo visto a la compañía no le sale a cuenta tenernos como clientes y seguro que la IA ya le ha aconsejado que no nos hagan ni caso.
Le estoy dando vueltas a cómo luchar contra una inteligencia artificial. Desde luego introducir el factor humano es lo que más la desbaratará, seguro.
Pero tendré que afinar porque los algoritmos cada vez son más sofisticados. Casi aseguraría que Simyo dispone ya de mi perfil de personalidad mis intereses y mis emociones básicas.
No sé si saldré o no victorioso pero quiero dar la batalla.