Muchos zaragozanos estarán de acuerdo conmigo. Cada vez se ven más vehículos motorizados de dos ruedas por la ciudad. Y, afortunadamente, el ayuntamiento se acuerda de nosotros y nos va reservando espacios para poder estacionar nuestras motocicletas.
Ha pasado mucho tiempo desde los inicios de las dos ruedas. Todavía recuerdo la anécdota que me contaba mi abuelo Pedro cuando, en Pamplona vio por primera vez una bicicleta. Un compañero que estaba a su lado le dijo impresionado: ¿Has visto como "corriba" el velocípedo?
Y con el recuerdo de mi abuelo me despido ¡Hasta mañana, amigos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario