Según van pasando los días, el tono de la campaña electoral catalana va subiendo. Y las imágenes de los abucheos a algunos políticos nacionales también nos llaman la atención. Yo creo que quien más quien menos todos vamos haciendo pronósticos de cómo puede terminar todo esto. Y supongo que en el gobierno central ya habrán preparado distintos "escenarios" en función de los resultados electorales y el desarrollo de acontecimientos posteriores.
Lo más preocupante sería que la violencia hiciera acto de presencia. Y no es algo desdeñable dado que, si gana la opción independentista es seguro que la tensión todavía se incremente más. No quiero ni pensar lo que pudiera suponer la destitución, en su caso de Más. No creo que, mansamente, ni él ni sus seguidores aceptaran de buen grado dejar el paso a otro gobierno designado por autoridades del estado español.
Así es que, en general, la mayoría estamos a la expectativa de ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Una pena. No resulta agradable esta atmósfera tan cargada. Unos y otros han contribuido a enrarecerla. Y lo más triste es que, una vez que se han tensado tanto las cuerdas, va a resultar bastante complicado rebajar esta tensión.
El eterno problema de los políticos en España, si se hubieran dedicado en estos años a crear riqueza en vez de perder el tiempo en reivindicaciones no habría tanta gente en el paro ni tanto desencanto con ellos. Falta mucha política de altura..., pensar más en la gente,... en el sufrimiento y dejarse de aventuras que no vienen a cuento, la gente sólo quiere vivir en paz. Un abrazo de Javier
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