Yo creo en Dios, solo no confió en nadie que trabaje para Él.
Todo ha sido adentrarme en las islas Salomón y darme de bruces con la figura de Don Álvaro de Mendaña, su descubridor. Cuando me he acercado a la isla de Guadalcanal me he topado asimismo con los restos de la cruenta batalla librada entre americanos y japoneses en el año 1942.
Mi interés por Mendaña se ha ido incrementando según iba conociendo las peripecias de su expedición a aquellas alejadas islas situadas en el Pacífico, a más de 13.000 km desde el puerto de El Callao en Perú.
La curiosidad por conocer en detalle los acontecimientos que tuvieron lugar en la batalla de Guadalcanal, me ha llevado a buscar más información sobre la misma tanto en la web como en YouTube.
Después de buscar y rebuscar, leer e informarme, no he podido menos que confesarme a mi mismo: ¡Hay que ver cuánta historia se aprende viajando!
En la Wikipedia tenemos a nuestro alcance toda la información sobre las islas Salomón. No hace falta repetirse. Mi contribución versará -como es habitual- sobre aquellos aspectos que más me han llamado la atención sea cual fuere su causa.
Prestemos en primer lugar atención al parámetro extensión territorial: 28.450 km2. Como la comunidad de Galicia, más o menos. Aquí ya hay más "sustancia" que en las Marshall. De su población podríamos también decir lo mismo: acercándose a las 700.000 almas.
Todavía se conservan los nombres en español de cuatro de sus islas: Santa Isabel, San Cristóbal, Guadalcanal e islas Santa Cruz. Así que aún podríamos hacer un hermanamiento con la patrona de mi pueblo, la virgen de San Cristóbal. El español ha sido totalmente borrado y, al igual que estamos viendo en otros países, aquí lo que domina es el inglés.
La capital es Honiara y ahora mismo vamos a darnos una vuelta por allí para meternos en harina.
En este vídeo nos explican la historia, geografía y demografía de las islas.
Y, a continuación, descubramos más cosas con este vídeo oficial de promoción turística (Subtítulos en inglés)
Veamos ahora una característica sobresaliente de algunos de los habitantes de estas islas donde muchos niños y niñas de raza melanesia-negra cuentan con una abundante mata de pelo ¡rubio!
Nos lo relata nuestro amigo Drew Binsky y también podemos verlo en este didáctico informe.
Vamos a descansar un poco. Hagámoslo dándonos un chapuzón en las prístinas aguas del país.
Abordemos ahora el plano económico. El atún es un productivo recurso de las islas. También la minería de oro reporta grandes beneficios al país. La extracción de maderas tropicales ha supuesto, asimismo, un gran empujón económico. Pero ahora tienen que controlar la excesiva deforestación.
El turismo, por supuesto, constituye otra importante fuente de ingresos. Aquí tenéis la página web oficial de turismo de las islas. Por cierto, que los chinos también quieren entrar en el mercado turístico de las islas. Nos lo explican en este informe.
Otro receso para retomar fuerzas. Os invito a cantar conmigo en esta peculiar "misa salomonesa".
Qué, ¿Qué os parece el dominio de las chanclas de los dos músicos de la derecha del vídeo? Cuantas más veces oigo esta música, más me gusta.
Retomemos nuestra visita a las islas. Hagámoslo disfrutando este emotivo vídeo de National Geographic.
Ahora nos pasearemos por la provincia de Malaita donde podremos admirar el trabajo de artesanía que realizan con conchas de crustáceos. Pulseras y collares se han venido usando como genuino dinero para el pago de bienes y servicios.
Una curiosidad ¿Sabíais que, en teoría, España todavía tendría jurisdicción sobre 4 islas cercanas a las Salomón? En este vídeo nos lo explican. Yo me he quedado a cuadros.
Finalizo mi viaje echándole un vistazo a la página web oficial del gobierno salomonés.
Y disfrutando de nuevo la cañera música de viento y percusión (nunca mejor dicho)
¡Eso es todo por ahora, amigos y amigas!
Debo apurarme porque en nada sale mi avión para Sidney. Allí haré un transbordo que me llevará hasta Israel, mi próximo destino.
¡Qué ganas tengo de llegar! Os cuento mis peripecias la próxima semana.
Bella música de percusión que se integra en esa tranquilidad del mar.
ResponderEliminarVida plácida y tranquila proyectan sus habitantes rubios, eso nos llevan de ventaja.
Parajes preciosos y playas inmensas.
Guadalcanal y sus batallas, la segunda guerra mundial se recreó allí, hay mucha información y documentales, señal de que esos acontecimientos fueron tremendos.
No sabía que España tenía allí unas barranqueras olvidadas, de cuando éramos dueños de medio mundo.
Hay belleza por todos los rincones, todo azul, azul, impresiona esa zona de la tierra.
Amena visita estas dos semanas a Oceanía.
Y buen reportaje, como siempre.
Saludos de Javier.
Ja, jaaaa. Me encanta lo de las barranqueras olvidadas. Por cierto que yo tengo una de mi abuelo José por el Arba de Malpica. Seguro que el río habrá dado buena cuenta de ella.
ResponderEliminar¡Saludos!