Raro en mí, pero hoy he tenido la paciencia de terminar una película. Está claro que la clave ha sido que, en esta ocasión la había elegido yo, al contrario de lo que sucede habitualmente cuando te pones delante de la caja tonta.
Y he elegido "Gravity" porque el tema de la aventura espacial me apasiona y, además, porque tenía una somera idea de la magnificencia de sus efectos especiales así como de los 7 premios Óscar de la academia con los que se ha reconocido la obra del director, el mexicano Alfonso Cuarón.
Total que la película me ha enganchado desde el primer momento. Todo en ella es espectacular: empezando por el hiperrealismo de las escenas en ausencia de gravedad, continuando con lo acertado del guión y siguiendo con la estupenda interpretación de Sandra Bullock y de George Clooney. La música también está muy bien elegida y el nudo en el estómago está asegurado desde el primer minuto de proyección. A la vista del cariz que iban tomando los acontecimientos, en varias ocasiones he tenido que pensar que la protagonista no podía morir porque si no terminaría la película.
Me ha servido también para visualizar la extrema inclemencia del vacío sideral con el ser humano. No hay consideración. Si te falla el oxígeno o el amarre a la nave, tu destino está ya fijado. No hay escapatoria.
Lo dicho: excelente película que no me importaría ver de nuevo. Y me he quedado con la mosca detrás de la oreja con el tema de los efectos especiales porque no me puedo imaginar cómo han podido conseguir un trabajo tan bien acabado. En Youtube hay algunos vídeos explicativos.
Como complemento final de un domingo diferente, he estado escuchando este estupendo concierto que dio la Fanfarria Ciocarlia en Berlín en el año 2004.
Sus artículos son frescos y sin cabreos, su relax transmite esta sensación, momentos pasados felices del gran cinema. Hay películas que sorprenden, Un abrazo de Javier.
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